Este viernes 13, día de supersticiosos tendentes a la costumbre americana, hubo luna llena. Fue especial y conocida con el nombre de "Luna de la Fresa", que coincide siempre con el solsticio de verano. Era brillante, embrigadora, envolvente, luminosa como ninguna, con una luz inigualable y con unos efectos mayores que otras lunas llenas. Esta vez, te afectó a las emociones, al sentimiento, al humor, a tu estado anímico... Quizá no te diste cuenta, pero ese día la Luna influyó en nosotros de alguna manera.
Es la primera vez desde el 13 de octubre el año 2000 no caía en viernes 13. Se le llama Luna de la fresa porque todas las tribus realizaban las cosechas de fresas en junio, aunque en Europa se le llegó a conocer como Luna de la Rosa. También ha recibido otros nombres como Luna de miel, Luna caliente, Luna de plantación o Luna de la fuerza solar. Esta última por la energía poderosa que concentra.
El Sol se acerca a su máximo reinado y con él toda su fortaleza y vitalidad, asociada a la festividad de Litha y al solsticio de verano, que ha sido muy importante en distintas culturas. El solsticio de verano nos regala la imagen de
una Luna llena a veces dorada y otras rojiza por el brillo que
desprende el sol en su punto más alto. La sensación a nuestros ojos es que el satélite es mucho mayor que en otras ocasiones.
En relación a eso, desde 1979 se publica el Calendario Astronómico de Guy Ottewell, donde indica que la luna llena de junio será la más ámbar del 2014, sobre todo al atardecer. Este autor sugiere que esta luna de color miel podría ser el origen del término "luna de miel", debido a que las bodas solían celebrarse con mayor frecuencia en junio, como hacían los egipcios. La frase data desde el año 1552 y hace referencia a la luna llena como el principio de un matimonio, cuando se encuentra en su etapa más feliz y "brillante".
En Luna llena, los egipcios celebraban la fiesta de Edfu, en honor a la diosa Hathor,
cuya característica son los cuernos de vaca que cubren su cabeza y que
representan la Luna creciente.Cada año, en la Luna nueva, la estatua de
Hathor la llevaban desde su templo de Dendera en un bote al templo del
Gran Dios Horus en Edfu para acercarse a la Luna llena. Entonces,
celebraban la unión de ambas deidades y motivo de grandes festejos como
por ejemplo, numerosas uniones de parejas, pues consideraban que la
unión sería afortunada.
Para mí, ha sido especial y ha supuesto mucha influencia. Sentí los sentimientos a flor de piel y comprobé como a otros de mi alrededor lo hacían igualmente.
Era también San Antonio y lo celebré con mi familia, pues es el nombre de mi padre y nosotros celebramos los santos. Mi madre describió a la luna como "de cuento", de aquellas que se dibujan para representar que los lobos aullan por las noches, donde suelen ser muy intensas y con alguna nube sutil por delante.
Todo ha estado confluyendo y no creo que sea coincidencia la decisión de mi grupo de hiphop de grabar un vídeo de una coreografía nuestra en la playa, al amanecer, justo cuando el Sol está más cerca y la Luna brilla más que en todo el año. Ha sido un fin de semana increíble y el vídeo se verá próximamente.
Inspiración:
- Artículo "Este solsticio de verano pintará a la luna de dorado"
- Blog El Círculo Celta: "Luna llena de 13 de junio de 2014 (Luna de fresa o de miel)"